Un tema muy controvertido, y sobre el que hay mucha confusión, vendría siendo la falsa creencia sobre el contenido en el marketing, llevamos poco tiempo trabajando sobre un terreno empantanado que vamos conociendo muy lentamente. ¿Y por qué sucede esto? Porque nos limitamos solamente a repetir lo que otros dicen, porque suena bien. Sin embargo, los momentos en los que alguien se levanta y cuestiona esta “información verídica”, ya establecida mediante una experiencia real, son muy escasos, pero son precisamente estas experiencias reales las que nos llevan al siguiente nivel de conocimiento dentro de una profesión.

Los contenidos sí colaboran con el posicionamiento SEO exitoso, pero no todos necesitan de contenidos para tener éxito. La mayoría piensa que es necesario tener contenido en formato de texto para que una página prospere enérgicamente en Google. En efecto es cierto que el contenido (habrás notado que me refiero al texto) nos ayuda a posicionarnos y parece que Google se basa en las palabras que encuentra en un texto para darte un puesto en los resultados, pero hay una cosa que no conoces que es realmente interesante: Google no reconoce la calidad de un contenido en texto.

Y si Google no es capaz de medir la calidad de un texto, ¿Cómo puedo posicionar el mío por delante de otro? Google, para discernir cuál va en frente de cuál, usa ciertos patrones de medición, como la semántica y keywords, pero lo que realmente valora es el comportamiento de visita en tu página. Lo que tiene valor realmente, de cara al SEO, es la estimulación del usuario, sea cual sea la vía. Pensaremos que el texto puede ser casi siempre el causante de esa estimulación por ser la forma de dar un valor agregado al público, pero no es algo imprescindible. Toda la teoría del SEO se basa y apoya en la respuesta del usuario.

Los textos sirven para darle de comer a Google y posicionarnos más alto, pero sólo son importantes cuando ellos son los causantes de generar esa respuesta de usuario. No todas las webs la generan con texto. Si aún no entiendes a qué nos estamos refiriendo, tomemos como ejemplo una página de juegos online, ¿Cómo genera su respuesta en el usuario esta página? Si entramos a navegar dentro de ella, podemos observar que la cantidad de texto es casi nula, ¿Por qué? Porque la gente no entra allí para leer acerca de los juegos, ¡entran para jugarlos! ¿Y eso significa que tiene menos visitas? En lo absoluto.

Otro ejemplo sería la página “Letras.com”. Ésta es una típica página donde están las letras de las canciones de diferentes artistas. No tiene casi contenido, sólo las letras en cursiva, pero si nos ponemos estrictos desde un punto de vista SEO añadiríamos que, además de tener poco contenido, es duplicado. ¿Por qué? Porque la letra de esa canción de Ed Sheeran, que tanto me gusta, puedo conseguirla en otras cientos de páginas. ¿Y eso hace que tenga menos visitas? En lo absoluto.

Con esta información, aunque nadie puede conocer el futuro, podemos averiguar una parte de cómo movernos por este terreno. Google seguirá mostrando en las primeras posiciones el contenido que el usuario quiera ver y para conseguir estar entre éstos, podríamos hacer una evaluación de las diferentes respuestas de los usuarios a los distintos resultados para ver qué trabajar para conseguir posicionarse. La respuesta del usuario ha desbancado al antiguo rey, se ha convertido en la reina y no hay quien le quite su puesto.